Tengo una familia clásica que se cree moderna.
Como cuando me dieron la invitación al casamiento y las palabritas "...y compañía" parecían devolverme la mirada. Me quemaban el cerebro. La invitación era muy linda, muy avant-garde, y sigue guardada en las profundidades de un cajón lleno de cacharros inútiles.
"No, vos no le compres regalo de navidad a nadie, somos impares."
Jo, jo, jo.
Feliz navidad.
Atte, yo. Sí yo, la soltera.